viernes, 25 de diciembre de 2009

Pulsiones II 63


Pulsiones II Decía en otra aportación que pulsiones o mejor dicho listas de pulsiones habría tantas como escuelas psicológicas.
Un ejemplo claro es la lista de MacDougall.
(Con criterio ausente; que lo mismo puede valer para ir a la farmacia que al supermercado).

Hela aquí:
Busca de alimentos, asco, sexo, temor, curiosidad, caridad, sociabilidad, autoafirmación, sumisión, cólera, búsqueda de ayuda, creación, deseo de posesión, diversión, tendencia a la comodidad, al reposo, al sueño, el nomadismo. Y las tendencias a las funciones corporales: estornudar, toser, respirar, defecar, (No hay pulsión de micción ni a las ventosidades). -Alabado sea el preclaro-.

Menudo batiburrillo. No hay que ser muy sagaz, para observar que en la lista coexisten, en maravilloso desorden: Tics vitales o actos relacionados con la entidad biológica que los soporta como -el toser-. Con funciones derivadas del hambre -búsqueda de alimento-. Funciones relativas al ego y la personalidad -deseo de posesión-, y relacionadas con los otros próximos o lejanos.
Por tanto y para corregir, una buena definición de pulsión, debe asociarlas en función de su campo de acción. Sin que ello signifique que no existan otras taxonomías tan validas o mas que esta.
La primera aproximación, es con toda evidencia, la que se hace en función del sujeto sobre el que actúan. La primera dicotomía, será aquella que las agrupe en somáticas -aquellas que su sujeto es el cuerpo-. Y psíquicas las que su funcionalidad se articula sobre la mente, la personalidad el ego. Y a su vez, podríamos incluir, en estas últimas, una segunda división. Las que podemos tildar de Reflexivas, es decir el objeto es el yo de manera directa. Y las Transitivas es decir aquellas que tienen como objeto el otro o los otros. Si acaso, fuésemos capaces de desarrollar otra lista de aquellas funciones transitivas recíprocas. Es decir las que implican un intercambio de contenidos entre distintos entes. (Se usa ente o entidad porque no necesariamente la pulsión debe unir a individuos de la misma especie, por ejemplo en el amor entre hombre y mascota).
A mi entender, el mejor esquema para efectuar un trabajo útil es, -a pesar del mal uso, que se le ha hecho- la pirámide de Maslow; que une a la ventaja de establecer una jerarquía, el permitir una ubicación temporal en el desarrollo de la persona.
Me explico, si el deseo de posesión es una pulsión. El deseo de tener para mi -egoísmo-. Es una consecuencia del deseo de poseer, pero el egoísmo como su propio nombre indica es para el ego, para el yo. Lo que significa que antes de manifestarse el egoísmo debe estar establecido el yo., el ego.
Tanto el psicoanálisis como la psicología evolutiva tienen algo que aportar en cuanto al nacimiento y desarrollo del ego. (Por ello he cambiado el orden de los “pisos” en el original de Maslow y el ego esta por debajo de las necesidades sociales, es pura coherencia; que para una relación social, es menester un yo y su concepto, antes que nada).
En resumen una pulsión, es una oración. Transitiva, reflexiva, o recíproca. Siempre requiere un sujeto. El ego, con todo lo que de desarrollo psicosomático implica.
Vasdelao.

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